¿Qué es meditar y cómo empezar?
La meditación es una actividad esencial si quieres disfrutar de una vida más plena y satisfactoria, gracias a que aporta múltiples beneficios. Sin embargo, la meditación no se trata únicamente de sentarte en silencio y ya.
¿Qué es la meditación?
La meditación es un entrenamiento que abarca diferentes disciplinas meditativas, las cuales tienen como finalidad disminuir los niveles de estrés, mejorar la capacidad de atención y cambiar las emociones.
Cuando comienzas a meditar, puedes alcanzar un estado profundo de relajación, influyendo de forma positiva sobre tu bienestar y salud.
Un punto a favor de la meditación es que cualquier persona la puede practicar. Aunque hay algunos tipos de meditación que no podrás practicar, por tener un bajo rendimiento físico.
Por lo tanto, se recomienda consultar con un profesional para saber qué tipos de yoga funcionan mejor para ti, dependiendo de tu condición física.
La meditación es una actividad que puedes practicar en cualquier momento, gracias a que la actividad influye de forma positiva en el sistema nervioso, encargado de controlar la acción involuntaria de “lucha-huída”, la cual se produce en el cuerpo como respuesta al estrés.
Esto provoco un aumento en el ritmo cardíaco y respiratorio, así como un incremento en la cantidad de sudor que produces.
Con la meditación, puedes reducir el estrés, los ataques de ansiedad y hasta los comportamientos adictivos que terminan por afectar tus actividades diarias.
¿Qué tipos de meditación existen?
Esta actividad la puedes practicar de dos formas diferentes, dependiendo de los objetivos de relajación y atención que deseas alcanzar. Es importante conocer qué conseguirás con cada tipo de meditación, para saber cuál es la indicada para ti.
Meditación de conciencia plena
Con esta meditación puedes cambiar la forma de sentir, pensar y actuar. La finalidad de esta actividad es sentirte más libre de emociones, pensamientos y acciones negativas.
En su lugar, fortalecerás e incrementarás los pensamientos positivos, mediante un estado de consciencia plena y enfoque en tu respiración.
Cuando consigues una inmersión profunda, sin reaccionar a los estímulos exteriores, aprenderás a repartir los emociones y pensamientos de forma balanceada.
Además, si la combinado con el yoga, notarás grandes mejoras en la flexibilidad de tu cuerpo.
Meditación trascendental o MT
Con esta meditación seguirás una técnica diferente a la anterior mencionada. En las sesiones, debes repetir un mantra varias veces, manteniendo la voz baja o en silencio.
Mantener la voz baja o en silencio mientras repites el mantra, evitará que te distraigas y pierdas la concentración, facilitando la entrada a un estado de relajación total.
¿Cómo se práctica la meditación?
A la hora de meditar, hay varias pautas que puedes seguir si quieres realizar la actividad de forma correcta y aprovechar todos los beneficios que aporta. Entre las principales, se encuentran las siguientes pautas.
Comodidad y tranquilidad
En la meditación es fundamental la comodidad, debes tener ropa confortable y ancha, retirando los zapatos, relojes y demás complementos. Lo esencial en sentirte enfocado en tus pensamientos para poner más atención al ahora.
Recuerda que la meditación requiere de al menos 15 minutos todos los días para que sea eficaz, por lo que no debes sentirte incómodo con la ropa que llevas puesta.
Además, debes elegir un lugar tranquilo donde nadie te moleste, así como una hora del día donde no seas interrumpido con facilidad, para evitar cualquier tipo de distracciones que afecten la atención en la práctica.
Mientras más silencioso sea el lugar, más inmersiva es la meditación. De igual manera, puedes usar auriculares y escuchar diferentes sonidos, como de animales, naturaleza o el mar, por ejemplo.
Elige una pose cómoda
La pose influye mucho a la hora de meditar, por eso, debes sentarte en una superficie plana, y mantener la espalda recta y sin tensión. No es necesario cruzar las piernas o hacer gestos exóticos con la mano.
En la meditación lo importante es sumergirte en la actividad, por lo que puedes usar una silla o un cojín, y solo sentarte en ellos mientras meditas. Con una pose cómoda, resultará más fácil relajar el cuerpo, lo que favorece la práctica de la meditación.
Respirar adecuadamente
La respiración es fundamental en la meditación, cuando inicias la práctica, cierra los ojos y presta atención a la respiración. Puedes observarla, sentir como la nariz se mueve o cómo se libera de tu cuerpo.
El enfoque puede variar según las meditaciones, hay unas que se centran en los sonidos y otras en el cuerpo.
Aceptar los pensamientos
Al momento de meditar, es habitual que aparezcan todo tipo de pensamientos, tanto negativos como positivos.
Cuando aparezcan los pensamientos negativos, como problemas personales o inseguridades, no debes evitarlos en ningún momento. Al contrario, acepta estos pensamientos que surgen y sigue adelante.
La finalidad de la meditación es que consigas un mayor bienestar psicológico. En todo caso, es fundamental llevar la atención a los pensamientos positivos que se enfoque en situaciones de tu interés.
Si sigues estos pasos todos los días, incrementarás el tiempo de la meditación, y lograrás un estado de inmersión más profundo.
Sin duda, la meditación es una actividad que debes practicar si buscas un mayor bienestar para tu mente, gracias a que mejora tu estado de relajación y tranquilidad, lo que permite enfrentar los problemas diarios desde una mejor perspectiva.
